EL ALAMEIN
A finales del verano de 1942 las tropas del Eje se encontraban a 100 kil�metros de Alejandr�a.La lucha en el frente ruso debilit� las posiciones del Eje en Africa y las tropas de Rommel recib�an cada vez menos aprovisionamientos.Qui�n si recib�a nuevos suministros era el general Montgomery , comandante en jefe del VIII ej�rcito logrando una superioridad en tanques, aviones, transportes y hombres que ser�a decisiva en la lucha contra el enemigo.Ahora dispon�a de mil tanques contra 600 de Rommel, el doble de aviones y una abrumadora superioridad en artiller�a.Entre la RAF y la Royal Navy las v�as de aprovisionamiento de Rommel se desmoronaban.Esta debilidad fue muy bien aprovechada por Churchill que en conjunto con Montgomery planific� una ofensiva en El-Alamein con una fuerza de 220.000 hombres, organizados en diez divisiones y con el apoyo a�reo de las escuadrillas de la RAF que contaban con una superioridad abrumadora en aviones(1.585 aparatos contra 350 del Eje).
Rommel y sus hombres en el desierto africano
El 23 de octubre Montgomery inici� la ofensiva.La l�neas alemanas estaban defendidas por los llamados"Jardines del Diablo", a base de campos de minas, alambrados y zonas de fuego cruzado.En El Alamein no hab�a margen para maniobras de envolvimiento; las defensas ten�an que ser rotas en forma frontal. El largo de la ofensiva abarcaba 50 kil�metros, en una l�nea recta que baja desde El-Alamein, en la costa, hacia el sur, donde la cierran las arenas movedizas y pr�cticamente infranqueables de la depresi�n de Qattara. En el momento del ataque, el jefe del Africa Korps, mariscal Erwin Rommel, se repon�a de una enfermedad en Austria, por lo cual el peso de la defensa recay� en su segundo, el general Stumme, que poco despu�s morir�a de un infarto por las presiones vividas. Una vez superados los "jardines del diablo", las fuerzas aliadas deb�an enfrentarse a dos divisiones Panzer del Afrika Korps protegidas por una fila de bater�as y una cadena defensiva a cargo de las divisiones Brescia, Trento, Pavia y Bologna, pertenecientes al X y XXI Cuerpos de infanter�a italianos. En el extremo norte, cuatro regimientos de la 164� Divisi�n alemana proteg�an la l�nea de la costa. A los Panzer se sumaban las divisiones blindadas italianas(Ariete y Littorio) adem�s de la reserva de la divisi�n Trieste de artiller�a. En total, 103.000 hombres(49.000 alemanes y 54.000 italianos) debieron enfrentarse a una fuerza que los duplicaba en n�mero de efectivos y armamentos. Para este combate entran en escena los tanques Sherman M 4 con ca�ones de alta velocidad, de 75 mm y largo alcance, que contrarrestar�n la antigua superioridad de los tanques alemanes Pzkw III y IV que neutralizaban los blindados brit�nicos y norteamericanos en base a su blindaje y potencia de fuego. La ventaja aliada en carros de combate era de 1230 unidades contra apenas 548 de las fuerzas del Eje y encima las divisiones italianas contaban con tanques ligeros CV, m�s conocidos como latas de sardina por su fragilidad.La sorpresa del ataque fue total y se cobr� enseguida la vida del general Stumme, a cargo de la defensa en ausencia de Rommel, quien fallece de un ataque card�aco tras inspeccionar las l�neas del frente, el d�a 24 de octubre.Antes de morir, el desafortunado general alcanz� a telefonear a Berl�n para pedir el inmediato regreso de Rommel. Este �ltimo a�n se encontraba convaleciente pero igualmente decidi� volver a Africa para guiar a sus hombres que por aquellas horas se derrumbaban ante el incontenible avance de Montgomery. La situaci�n que encuentra Rommel en Africa es dram�tica, con las v�as de comunicaci�n sometidas a intensos bombardeos y con escasez cr�tica de combustible, municiones y v�veres. Entre la RAF y la USAAF(fuerza a�rea norteamericana) lograron hundir el 66 % de los suministros de combustible provenientes de Italia, a trav�s de las bases a�reas de la isla de Malta, en el Mediterr�neo, la misma isla que Mussolini incre�blemente no ocup� en junio de 1940.
Tras doce d�as de intensa lucha, Montgomery desbarat� las
posiciones del Eje y lanz� sus carros de combate por las grietas que se abr�an.El
4 de noviembre las tropas del Eje se hallaban en retirada y empleando el escaso
combustible que le quedaba, Rommel logr� rescatar al Afrika Korps de las garras
de Montgomery pero para ello debi� desprenderse de cuanto no le era esencial y
abandon� a su suerte a la infanter�a italiana.Con p�rdidas que se elevaban a
40.000 hombres, mil ca�ones y 500 tanques, ya no quedaba completa ninguna
unidad del Eje.En tres meses, Montgomery hizo retroceder a las tropas de Rommel
mil quinientas millas a trav�s de
los restos del imperio italiano hasta llegar a T�nez. Como dijo Churchill en
sus memorias: "Antes de El-Alamein no conocimos la victoria; despu�s de
El-Alamein no conocimos la derrota".