BENITO MUSSOLINI(1883-1945)
Hijo de un anarquista
revolucionario llamado Alessandro Mussolini y de Rosa Maltoni, maestra de
escuela, Benito Mussolini nace en Dovia,fracci�n de Predappio en la Roma�a, el
29 de julio de 1883.
De ni�o frecuent� la escuela
Salesiana donde le hizo la vida imposible a sus superiores.Un informe que se
conserva de �l en la escuela religiosa dice textualmente: "Joven
impulsivo, rebelde pero muy inteligente, de naturaleza incompatible con el
sistema de educaci�n de una escuela Salesiana".
Sus amigos lo recordaban como un
ser irascible con quien no se pod�a discutir sin ir a las manos.Ten�a
predilecci�n por la geometr�a, la historia, la pol�tica , la m�sica y la
poes�a.A pesar de su car�cter rebelde cursa estudios superiores y se grad�a
de profesor de franc�s .Ya en esos tiempos era un magn�fico orador que
encantaba a sus oyentes hablando de Verdi, de Garibaldi o de cualquier tema que
se le cruzara por la mente.Ejerci� como docente en las escuelas medias de
Gualtieri pero pronto emigra a Suiza en busca de nuevas aventuras.All� aprende
el alem�n y el ingl�s que a�os m�s tarde le resultar�an de gran utilidad en
sus conversasiones directas con Hitler o con Chamberlain.Sus lecturas preferidas
eran Nietzsche, Marx y Schopenhauer.Cuando
lo convocan para el servicio militar, adultera la fecha de su pasaporte pero fue
descubierto y expulsado de Suiza.En Italia , en tanto, lo buscaba la justicia
por desertor y los diarios socialistas de la �poca publicaron la noticia.Eso
demuestra que un Mussolini de menos de 30 a�os era ya un personaje conocido y
los diarios se refer�an a �l como "el gran Duce de la primer secci�n
socialista de Italia".En Italia se decret� una amnist�a contra los
desertores y eso le evit� una condena pero finalmente tuvo que hacer el
servicio militar en Verona.Como conscripto se mostr� profundamente
antimilitarista y alentaba la deserci�n de los convocados.Una vez dado de baja,
retom� sus actividades docentes en Tolmezzo y en Liguria.All� dirigi� por
primera vez un peque�o diario socialista llamado "La Lima".Desde el
periodismo vuelca sus ideas anticlericales y acusa a los sacerdotes de estar al
servicio del capitalismo.Al tiempo se dirige a Trento(entonces austr�aca) y
dirige el diario "L'Avvenire del Lavoratore" duplicando la tirada de
sus ejemplares.Cesare Battisti, el famoso socialista trentino, director del
diario "Il Popolo", fija su atenci�n en Mussolini y lo llama
para colaborar en su diario en calidad de redactor jefe.
Despu�s de un mes de trabajo, Battisti le pide a Mussolini que deje de escribir en su diario por la frontalidad y agresividad con que �ste trata algunos temas pol�micos.Especialmente se disgusta con los ataques que Mussolini le propina a la iglesia cat�lica.Mussolini, por su parte, contin�a atacando a la iglesia y agitando el ambiente en contra de la intervenci�n austr�aca en Trento, hasta que la gendarmer�a austr�aca inventa pruebas en su contra y lo arrestan.Mussolini, en se�al de protesta, inicia una huelga de hambre y los austr�acos,temiendo crear un m�rtir socialista, lo excarcelan y lo devuelven a Italia pero invit�ndolo a no pisar nunca m�s las tierras del Kaiser.De nuevo en Forl�, trabaj� en el bar de su padre y all� conoce a Raquele Guidi, su futura mujer y madre de sus cinco hijos.La federaci�n socialista de Forl� lo nombra secretario de la federaci�n y asume la direcci�n del diario " Lotta di Classe".En setiembre de 1910 nace su primera hija de nombre Edda con quien tendr�a durante toda su vida una relaci�n muy estrecha.En la Italia fascista, Edda ejerci� el rol de primera dama, en reemplazo de su madre que prefer�a el perfil bajo.Mujer de rasgos bell�simos, era fis�camente la fotocopia de su padre, con un car�cter en�rgico y rebelde.En 1930 en pleno apogeo del r�gimen se cas� con el conde Ciano qui�n lleg� a ser el delf�n pol�tico del Duce.Luego nacer�an Vittorio en 1918, Bruno en 1923, Romano en 1927 y Anamar�a en 1930.Mussolini tuvo una vida amorosa muy intensa y de sus inumerables relaciones sentimentales dej� hijos ileg�timos por toda Italia. Algunos de esos hijos extramatrimoniales llevaron el apellido del padre y llegaron a ser estrechos colaboradores del Duce en el r�gimen fascista.Albino Mussolini que naci� producto de su relaci�n con Ida Dalser fue acaso el m�s conocido.
En 1912 dirige el diario socialista " L'Avanti" desde donde se erige en portavoz de los trabajadores y denuncia la represi�n que el estado ejerc�a sobre el proletariado durante las huelgas en pos de mejoras salariales y dignas condiciones de trabajo.Cuando estalla la primera guerra mundial, Mussolini se muestra contrario a la intervenci�n de Italia en la guerra pero hacia octubre cambia sorpresivamente su posici�n a una neutralidad activa, viraje ideol�gico que le cuesta la expulsi�n del diario y del partido socialista.Mussolini advierte( y es el primero en darse cuenta) que la revoluci�n socialista estaba destinada a fallar antes de iniciarse.El ejemplo de la revoluci�n rusa lo termin� convenciendo.Los soldados unidos al pueblo, el colectivismo, la distribuci�n de las tierras, eran todos hechos saludables que se iban diluyendo a medida que la revoluci�n se consolidaba en el poder.Los odiados capitalistas eran reemplazados por dictadores estatales en las f�bricas y en el campo; la burgues�a zarista era expulsada por una puerta y llamada por otra ya que sus funcionarios eran los �nicos que conoc�an los mecanismos del poder.En noviembre de 1914 Mussolini funda en Mil�n el diario "Il Popolo D'Italia" con el apoyo financiero de la Fiat, la Edison, los Ansaldo y otros magnates de Italia.En agosto de 1915, siendo uno de los periodistas m�s famosos de Italia, parte como voluntario al frente de combate junto a otras figuras de la �poca como D'Annunzio, Marinetti y Cesare Battisti.En el frente lucha como simple soldado en la primera l�nea de fuego y en las trincheras del Carso, bajo las granadas austr�acas, haciendo alarde de un gran arrojo y valent�a hasta que en febrero de 1917 resulta gravemente herido.Permanece internado durante cuatro meses y una vez dado de alta retoma la conducci�n del diario.Terminada la guerra la situaci�n social en Italia era muy propicia para los planes pol�ticos de Mussolini.Una desocupaci�n creciente, los excombatientes que sent�an haber peleado por nada ya que Italia fue tratada como una potencia vencida y una econom�a quebrada le dieron a Mussolini la posibilidad de nuclear a toda esta gente desocupada y desilusionada en sus grupos llamados "Fasci di Combattimento", que en 1921 formar�an el Partido Nacional Fascista.
A la derecha, su nieta Alessandra Mussolini, actual diputada y de gran parecido
Mussolini abandon� el socialismo
tradicional por un socialismo nacionalista convencido de que la revoluci�n
socialista no pod�a exportarse a otros pa�ses sin antes madurar en la propia
patria.Uni� en un mismo grupo a la nueva clase burguesa de la posguerra con los
grandes industriales, los trabajadores, los excombatientes, los agricultores y
el ej�rcito dando forma a su concepto de corporativismo.La industria pesada, la
industria automotriz, los astilleros navales, los servicios de energ�a el�ctrica,
la qu�mica y otros sectores de la producci�n lo apoyaron convencidos de que
era el baluarte contra el comunismo.En su programa pol�tico Mussolini habla de
nacionalismo, anticlasismo y antisocialismo pero siempre a favor de la
colaboraci�n entre los productores y el proletariado.Reconoce el sufragio
universal, defiende el liberalismo econ�mico, la privatizaci�n de las
industrias estatales y la libertad de cultos.Cuando el 25 de mayo de 1922
organiz� su marcha sobre Roma, los distintos sectores de poder desde el
rey hasta los industriales ya hab�an tomado partido por Mussolini desde
mucho antes.El d�a en que se realiz� la marcha sobre Roma, los cuatro
quadrunviros(De Bono, De Vecchi, Balbo y Bianchi) que hab�an organizado junto a
Mussolini los preparativos de la marcha sobre Roma, se encontraban almorzando
con la reina Margarita.El Corriere della Sera salud� la llegada del fascismo al
poder como una garant�a contra el peligro socialista.El resto de los diarios
italianos afirmaban que el gobierno de Mussolini representaba el �nico camino para
restablecer el orden que todos los italianos ped�an.
Desde el poder Mussolini dict�
leyes sociales muy importantes que a�n hoy siguen vigentes como la jornada
laboral de ocho horas, la pensi�n por ancianidad, la jubilaci�n despu�s de
una vida de trabajo, el derecho a una justa retribuci�n, la protecci�n de los
ni�os y otras leyes que nunca antes los italianos hab�an conocido.Por primera
vez los ciudadanos se sent�an protegidos por el estado y orgullosos de ser
italianos.Las grandes obras p�blicas, la construcci�n de autopistas y la
creaci�n de nuevas industrias cambiaron la fisonom�a de Italia en pocos a�os.Si
en 1922 Italia era un pa�s todav�a medieval,
en los a�os treinta proyectaba hacia el mundo la imagen de un pa�s
moderno y pr�spero con un sistema pol�tico que muchos pa�ses del mundo
trataban de imitar.El fascismo estaba de moda y su l�der era admirado en todo
el mundo.Los grandes personajes de esa �poca
eran pr�digos en elogios hacia Mussolini.Churchill dijo de �l que era
el estadista m�s importante de su �poca, Gandhi afirm� que era el nuevo Mazzini
de Europa, Hitler lo admir� toda su vida y lleg� a decir que Mussolini era el
estadista m�s grande que hab�a tenido la humanidad en los �ltimos mil a�os,
Roosvelt lo citaba como modelo de conductor pol�tico y hasta el papa P�o XI
lleg� a decir que Mussolini era el hombre enviado por la providencia.Despu�s
de 1945 la historiograf�a de la posguerra borr� de un plumazo estos elogios
pero afortunadamente para un juicio justo todos estos dichos se conservan impresos en
los diarios y documentos de la �poca.
Mussolini amaba practicar deportes y gustaba mostrarse con el torso desnudo
Lamentablemente Mussolini cometi� grav�simos errores especialmente despu�s de la muerte de su hermano Arnaldo que adem�s de ser un brillante intelectual fue el mejor consejero pol�tico de su hermano.Mussolini nunca confi� en sus colaboradores pero se apoyaba mucho en la opini�n de su hermano con quien siempre mantuvo una excelente relaci�n.Todas las noches se hablaban por tel�fono y Mussolini le transmit�a a Arnaldo sus inquietudes y temores esperando el consejo justo.Si Mussolini era impulsivo y extravertido, Arnaldo era medido y prudente; si Mussolini era un genio intuitivo, su hermano era un ser racional y met�dico.La combinaci�n entre ambos daba una f�rmula casi perfecta e Italia recib�a sus beneficios.Pero en 1931 cuando el r�gimen fascista estaba en su apogeo, Arnaldo Mussolini muere sorpresivamente a los 50 a�os de un ataque card�aco.Toda Italia llor� su muerte pero especialmente Mussolini que nunca pudo reponerse de semejante p�rdida.Pocos d�as antes de morir, Mussolini dijo que cuando perdi� a su hijo Bruno sinti� que le arrancaban parte de sus entra�as, pero cuando perdi� a su hermano sinti� que con �l se fue la mitad de su alma.Las consecuencias pol�ticas que debi� pagar Italia a ra�z de la muerte de Arnaldo, nunca fueron valoradas en su justa medida por los historiadores.Lo cierto es que Mussolini qued� solo y rodeado de una corte de genuflexos que lo adulaban aprobando todas sus decisiones por m�s erradas que fueran.Para peor se termin� apoyando en su yerno el conde Ciano que era un hombre muy bien parecido pero absolutamente superficial e incapaz de resolver los problemas m�s nimios.La influencia de su hija predilecta Edda(que era adulada por la prensa alemana y por el astuto Goebbels) contribuy� decididamente a la letal alianza con la Alemania nazi.
En 1935
Mussolini se lanz� en su aventura imperialista invadiendo Etiop�a donde los
italianos cometieron verdaderos genocidios sobre los nativos.En 1938 y
traicionando las ideas de toda su vida aprueba las leyes raciales para
congraciarse con los alemanes.Finalmente en 1940 arrastra a su pa�s a una
guerra absurda donde se cometen desastres militares en cadena afectando incluso
los planes de los alemanes que pagar�n con la derrota una alianza
inexplicable.En 1943 en medio de las derrotas militares Mussolini es depuesto
por el Rey que de adulador pas� a verdugo, habr� un peque�o par�ntesis entre
1943 y 1945 en el que Mussolini act�a como lacayo de los alemanes desde la
llamada Rep�blica de Sal� hasta el tr�gico final en Piazzale Loreto donde su
cuerpo junto al de su amante Clara Petacci es exhibido y sometido al escarnio p�blico.
Mussolini fue ante todo un
excelente periodista, un ser intuitivo y un visionario en sus ideas pol�ticas.Fue un adelantado en muchos aspectos.Como estadista pol�tico demostr� ser
completo por presencia y capacidad de trabajo, amaba practicar todos los
deportes desde el tenis hasta el f�tbol y el boxeo, era un excelente jinete y
nadador, sab�a pilotear aviones, practicaba esgrima, hablaba 5 idiomas( franc�s,
ingl�s, alem�n, espa�ol e italiano), pose�a una vasta cultura y sus
discursos son una obra de arte.Los gestos ampulosos y exagerados, la voz met�lica
y potente, sus di�logos con las masas desde el balc�n lo muestran como un
actor consumado.Durante la �poca de la cosecha del trigo se pon�a a trabajar a
la par de los campesinos con el torso desnudo(el che en Cuba lo imitar�a 30 a�os
m�s tarde) o manejaba los tractores.Su personalidad arrolladora encantaba por
igual a hombres y mujeres y en cualquier conferencia internacional era el centro
de atenci�n y le gustaba oficiar de int�rprete para lucirse en su dominio de
los idiomas.Parec�a un hombre sin fisuras pero lamentablemente, y especialmente
despu�s de la muerte de su hermano(que casi coincide con la llegada de Hitler
al poder), empezaron a aflorar grietas ocultas que le terminar�an ocasionado un
da�o tremendo a la historia reciente de Italia.Sus inseguridades comenzaron a
acentuarse con el correr de los a�os, para detener sus impulsos naple�nicos ya
no estaba Arnaldo y para colmo en Alemania estaba surgiendo un l�der que
comenzaba a quitarle protagonismo a nivel internacional.Sus aventuras(o
desventuras) en Africa pronto comenzar�an a desprestigiarlo y el dictado de las
leyes raciales en 1938 dejar�a una huella indeleble en la historia de Italia y
marc� el comienzo del fin del r�gimen fascista.Grandes pensadores y f�sicos
de la talla de Enrique Fermi(que luego contribuir�a a construir la bomba at�mica)
dejaron Italia, los grandes capitales jud�os emigraron a otros pa�ses y la
opini�n general se mostraba indignada por la persecusi�n antisemita.El r�gimen
ya no ten�a el mismo consenso y la entrada de Italia en la guerra fue en todo
caso la estocada final a un largo proceso de desaciertos.En 1943, en medio de
las derrotas militares y mientras los aliados desembarcaban en Sicilia, el Gran
Consejo Fascista, que hasta entonces se hab�a limitado a avalar las decisiones
de Mussolini, se deshace de su jefe para
quedar bien ante los ojos del enemigo.El rey V�ctor Manuel III, eterno
admirador del Duce, tambi�n piensa en salvar su propio pellejo y depone a
Mussolini ordenando su arresto.Badoglio, el tercer hip�crita de esta historia,
genocida de nativos en Etiop�a en
1936, asume el nuevo gobierno y junto al Rey abandonan la capital y se dirigen
al sur dominado por los aliados.Rompiendo su palabra de honor, Badoglio le
declara la guerra a su aliado Alemania manteniendo la tradici�n italiana de
pasarse al bando enemigo.Ya dec�a Napol�on que no se pod�a confiar en los
italianos porque Italia nunca termin� una guerra del mismo lado en que la empez�.Al
poco tiempo Mussolini es liberado por los alemanes y contra su voluntad( el quer�a
retirarse de la pol�tica) Hitler lo nombra jefe de la Rep�blica fantoche de
Sal�.Los italianos del norte le siguen siendo fieles pero se desata una guerra
civil entre los partisanos y los fascistas.En Italia reina el caos con las
tropas italianas que no saben a quien servir, si a Badoglio, a Mussolini o a los
alemanes.La guerra se transforma en
una lucha fratricida entre fascistas y antifascistas y los alemanes invasores
dejan el sello de las SS sobre la poblaci�n civil italiana.Mussolini,
reducido a una condici�n de lacayo de los alemanes, incre�blemente sigue el
juego de �stos ordenando matanzas contra su propio pueblo.Viejos
amigos,jerarcas del partido y hasta el Conde Ciano, padre de sus nietos, son
fusilados por orden directa de Mussolini.Su hija Edda, luz de sus ojos, nunca le
perdon� el asesinato de su marido.Si a Italia la guerra le cost� lo indecible,
a Mussolini la guerra le cobr� a nivel personal la vida de su hijo Bruno que
muri� piloteando un avi�n y el afecto de su hija Edda que nunca
m�s le dirigi� la palabra.Cuando en 1945 Mussolini disfrazado de
soldado alem�n cay� en manos de los partisanos (seguramente mandados por
Churchill) en su camino a la frontera suiza, debi� sentirse aliviado.Sin
embargo, �l quer�a seguir viviendo para salvar su posici�n ante la
historia.Su viejo amigo, Sir Winston Churchill no le di� la oportunidad.